En esta nueva sección voy a analizar los actores cuya carrera está destinada a acabar con un Óscar. Intérpretes que película a película mejoran sus registros y de los que estoy muy seguro que pelearan por la preciada estatuilla en un futuro, siendo el primero cuya carrera voy a analizar un británico de 37 años que empezó a hacerse conocido como modelo.
ÓSCARS DEL FUTURO: TOM HARDY.
Cada día que transcurre, su caché sube como la espuma (y con razón). Con cada nuevo largometraje en el que participa, nos deja con un sabor de boca que mejora al anterior. Nacido de la cantera de Band of Brothers, de donde salieron otros intérpretes como Michael Fassbender o James McAvoy, este británico ha sabido dejar atrás su imagen como atractivo modelo para consagrarse una carrera que acabará con el preciado galardón dorado (esperemos que corra mejor suerte que Brad Pitt).
BAND OF BROTHERS (2001).
Esta aclamada serie nació de la producción de Steven Spielberg y Tom Hanks a través del interés bélico que desarrollaron con Saving Private Ryan. Con un papel esporádico ya dejó clara su capacidad, y pasó a formar parte de Black Hawk Down, la obra de Ridley Scott donde realizó su debut cinematográfico.
STAR TREK: NÉMESIS (2002).
Con una carrera enfocada en sus inicios principalmente a la televisión (con series como Colditz o The virgin Queen), Tom Hardy comenzaría a resultar asiduo para la farándula hollywoodiense después de encarnar al villano Shinzon en una de las películas de la saga Star Trek. Tras esto, papeles mayoritariamente en la gran pantalla cuando llegó su participación en una película de culto: RocknRolla.
ROCKNROLLA (2008).
Una de las películas de mafiosos por excelencia. En este filme, Hardy interpreta al joven Handsome Bob, el guapo del grupo, miembro de la banda Uno Dos. Su gran labor junto a Gerald Butler e Idris Elba comenzó a despertar la curiosidad de los grandes productores y directores de la factoría fílmica de Los Ángeles, siendo de esta manera como despertó el interés de uno de los grandes: Christopher Nolan. Todos sabemos como terminó esta maravillosa unión.
INCEPTION (2010).
Eames, el falsificador. Con este personaje, Tom Hardy nos dejaba claro que su capacidad actoral estaba a la alza y que solo se vería en aumento. Y nosotros agradecidos. Este desagradable aunque gracioso engañador es uno de los puntos fuertes de la película de Nolan, que está considerada una de las mejores de la historia. Y no es para menos.
THE DARK KNIGHT RISES (2012).
Y llegó Bane. Fruto de la preparación física brutal que el actor sufrió para el largometraje Warrior (película que reflejó pérdidas en taquilla) y de una nueva unión con Nolan, Hardy nos deleita con el malvado corpulento de voz sintetizada con que el Batman tiene que batallar en la magnífica trilogía The Dark Knight.
LOCKE (2013).
Con un argumento muy parecido a Drive (Ryan Gosling), este filme británico cuenta con Hardy tomando decisiones inesperadas mientras conduce y nos vimos hipnotizados por un diálogo excelente. Sin duda, un acierto del actor británico.
MAD MAX: FURY ROAD (2015).
En este renacimiento de la famosa saga que dio inicio en finales de los 70, Tom Hardy toma el papel principal de una producción que llevaba en producción desde 2009, viéndose obligada a parar en seco debido a la muerte del actor que iba a encarnar a Max: Heath Ledger. Hardy realiza una interpretación en la que no dice muchas palabras, pero por su imponente apariencia tampoco le hace falta.
PRÓXIMOS PROYECTOS
Tuvo que abandonar el ambicioso proyecto de DC Suicide Squad para centrarse en la nueva película del ganador del Óscar Alejandro González Iñárritu, The Revenant, grandioso proyecto que cuenta con la vuelta de Leonardo DiCaprio tras dos años de retiro. También existen fuertes rumores de que quiere llevar a la gran pantalla el aclamado cómic 100 Bullets, teniendo la intención de protagonizarlo. Sin duda, la carrera de este británico huele a Óscar.
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